Víctor López Jaramillo
Tendré que sembrar sal
Sobre mi patria hecha de tu recuerdo
Para que nada vuelva a crecer.
Que tu tierra se vuelva estéril
Que ya nada vuelva a florecer.
Que cuando llueva furia y melancolía
Al mezclarse con la sal de tu tierra
El barro sea fruto del Leteo.
Tendré que sembrar sal
Y quemar hasta los cimientos
Cada templo que construiste.
De tu perfume
Sólo humo y ollín quedarán
Debajo de la sal
Que los brazos del Río Leteo
Borrarán
Simplemente
Esperando a la lluvia
Que caiga sobre la tierra
Que será lodo, furia y melancolía
En el ostracismo sin pasión
Sin sangre y ya sin odio
Simplemente esperando a la lluvia.
El blog de Víctor López Jaramillo 
Si sembrar sal cura todas las heridas, a partir de hoy me cargo una bolsita. de grano o molida. no importa. Solo para sembrarla o echarla sobre los escombros de mi pasada e inmediata vida 🙂
Te quiero amigo. Mucho.
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Me gusta (estilo faisbu)
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Buen texto, víc. Algunos detallitos de taller. Deberías de ir a los talleres del Seminario de Creación Literaria: http://www.eloficiomayor.org.mx
Hay con qué, mi víc. Buen poema.
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