Luis H. Ducoing albergaba aspiraciones presidenciales, revela Wikileaks


Víctor López Jaramillo

(foto: CONACULTA.INAH.SINAFO.FN.MEXICO)

Para el gobierno de Estados Unidos,  Luis H. Ducoing, mandatario estatal de 1973 a 1979, albergaba aspiraciones de ser Presidente de la República, por lo que la gubernatura de Guanajuato sería el primer paso, al menos así lo revela un cable diplomático enviado por la embajada norteamericana en México a su Departamento de Estado, donde recoge las especulaciones en torno al guanajuatense.

Dicho documento pertenece al conjunto de cables diplomáticos desclasificados por el departamento de Estado estadunidense, correspondientes al periodo 1973-1976, y que recientemente la organización Wikileaks organizó y subió a su portal de internet.

En el documento titulado “Elecciones Federales Mexicanas de julio” y que está catalogado con la guía 1973MEXICO04719, elaborado a finales de enero de 1973 y firmado por Robert Henry McBride, embajador en México de junio de 1969 a enero de 1974, se hace un análisis de las elecciones de 1973 y destaca en su tercer punto las elecciones de Guanajuato.

Ese mismo año se realizaron comicios electorales para diputados federales, locales y seis gubernaturas, además de la de Guanajuato.

Del entonces candidato Luis H. Ducoing dice que es un “joven talentoso y brillante” y uno de los principales activos del PRI en esas elecciones.

El documento destaca que sin oposición al frente, realiza una intensa campaña electoral y que recibe amplia cobertura de la prensa nacional, por lo que la embajada norteamericana considera que esta amplia exposición nacional es preludio de cargos más prestigiosos en el futuro.

De hecho, es al final del tercer punto de análisis en donde afirma que “hay especulaciones de que Ducoing alberga aspiraciones presidenciales”.

Abstencionismo, el enemigo

Al hacer el reporte sobre las elecciones intermedias para renovar la Cámara de Diputados y las gubernaturas de Querétaro, Colima, Guanajuato, Sonora, Nuevo León, San Luis Potosí y Campeche, la embajada estadunidense informa a su Secretario de Estado, William P. Rogers, que el escenario que se prevé es una “campaña totalmente predecible y en la que el único oponente parece ser el abstencionismo”.

El analista norteamericano que elaboró el reporte afirma que hay una mínima pretensión por hacer una campaña electoral genuina, dado que la mayoría de los candidatos del PRI hicieron proselitismo a escalas menores, la cual fue exigida por la jerarquía del partido, para aparentar que existía una campaña política.

Sobre la oposición electoral, en el cable se asevera que los candidatos hicieron campaña por “curules de lotería”, garantizada bajo las proporciones de sistema de representación proporcional.

 

Campañas estatales, sin riesgo

En 1973, la hegemonía del PRI no era puesta en duda por la embajada norteamericana en México. Ni a nivel de elecciones de diputados ni de elecciones de gobernador, por lo que el discurso de la “apertura democrática” promovido por el Presidente Luis Echeverría Álvarez se enfrentó al fantasma de la abstención.

Aunque enfatizan en que dicha “apertura democrática” era más un recurso retórico que una práctica política, toda vez que se imponía el “dedazo” (en español en el original) como método de selección de candidatos, en donde destaca lo sucedido en Nuevo León.

Para el caso general de las elecciones estatales, sobresale que fueron un poco más interesantes que las federales, pues hubo un mínimo de oposición electoral.

Se recalca que las campañas estatales no tuvieron una buena cobertura por la prensa nacional y que la única información se limitaba a reportes generales publicados por los columnistas influyentes y spots pagados en medios electrónicos, en donde se narraban las biografías de los candidatos priistas.

Advierte que los mayores esfuerzos del Gobierno Federal, encabezado por Echeverría, se concentraron en promover una campaña de afiliación de votantes para derrotar el abstencionismo.

Incluso, señala que la promoción del voto superó en espacios en los medios electrónicos al tiempo-aire usado por los partidos políticos, principalmente el PRI.

 

La oposición, invisible

En el segundo punto del informe, la embajada de Estados Unidos considera que en esas elecciones, los candidatos de oposición fueron técnicamente invisibles. En algunos distritos electorales algunos sólo hicieron campañas simbólicas y únicamente en algunos municipios alejados los candidatos de la oposición hicieron intentos de campaña real, pero estos esfuerzos recibieron sólo una cobertura local menor.

Dice el documento: “Dadas las peculiaridades del sistema, esto era de esperarse. El dominio de PRI elimina efectivamente la posibilidad de que la oposición gane un asiento regular o ‘propietario’ (en español en el original) por lo tanto, obviando la necesidad de una fuerte campaña local o distrital.”

Comenta que la oposición tiene garantizados unos cuantos escaños, lo más natural para los panistas es hacer campaña interna y no externa.

“Pero como los partidos de oposición garantizaron ganar un número fijo de asientos de representación proporcional en este evento, la tendencia natural es ‘hacer campaña’ por estos asientos dentro de la burocracia partidista. Los miembros más jóvenes del Partido Acción Nacional han sugerido que la representación proporcional sea abolida, ya que su efecto real es obligar a los candidatos de oposición a abandonar las campañas populares en favor de una campaña restringida dentro del liderazgo del partido por ‘asientos de lotería’.”, afirma.

En el caso de las candidaturas priistas, dice que como la nominación se debe al “dedazo” o las maquinaciones internas, debe de seguir la línea partidista, y con ella, el programa legislativo del Ejecutivo. La única función independiente del diputado es el “Servicio Institucional”. Y en México, esto funciona de igual manera como una parte vital de la campaña. Debido a la total identificación del PRI con la burocracia gubernamental, el candidato puede prometer y cumplir una nueva escuela o la mejora del sistema de aguas en varias comunidades de su distrito. De ninguna manera esta función es “confidencial”, ya que es hecha de manera abierta y comentada generalmente de manera favorablemente en la prensa.

Observa que en cualquier nivel y cualquiera que sea la filiación, es muy difícil para cualquier candidato, el “hacer campaña”, en el sentido de que este término se usa en los Estados Unidos, ya que la legislación es en realidad una función del Ejecutivo en México.

 

“El PRI barrerá en las elecciones”

Finalmente, el reporte concluye que no hay sorpresas anticipadas en los resultados de las elecciones del 1° de julio.

“El PRI casi seguro, barrerá con la Cámara de Diputados y las siete gubernaturas. El PAN continuará mostrando incrementos moderados en la votación total pero probablemente no los suficientes para ganar un asiento propietario.

“Probablemente, todos los partidos de oposición reconocidos esperan incrementar la representación en la Cámara de Diputados vía la nueva enmienda constitucional, ya sea que los resultados de la elección lo justifiquen o no.

“Sin embargo, dado el fuerte compromiso personal del Presidente Echeverría a la ‘apertura democrática’ no excluimos la posibilidad de que a un victorioso candidato del PAN se le pueda permitir reclamar su asiento. Tal decisión, si se llega a dar, vendría de los niveles más altos, probablemente con intervención misma del Presidente”, se lee en el documento oficial.

Finalmente, dice que la embajada de Estados Unidos en México se mostrará alerta para descubrir si existe discrepancia en los resultados electorales y estará atenta a los resultados en los distritos disputados.

Así, en 1973, en una elección donde preveían que Luis H. Ducoing barrería en los resultados, el Departamento de Estado recogió las especulaciones de que el hoy exmandatario albergaba aspiraciones de ser Presidente de la República.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.